Cómo hacer plata manipulando a los demás 

Dicen que cada quien tiene su propia fórmula del éxito, en este caso veamos la de Cielo Latini.

Esa chica y yo tenemos muchas cosas en común, cómo Harry y Voldemort, y como ellos, también tenemos una diferencia fundamental: nuestras decisiones.

El TLP es un trastorno de personalidad, un mecanismo de defensa que adquirimos por predisposición genética o por una infancia caótica dónde nos sentimos abandonadas y desprotegidas.

Y sí, es parte de los síntomas la capacidad para manipular a los demás. Pero no manipulamos a decisión, no es por gusto o conveniencia, es una cuestión de sobrevivencia. Nos sentimos morir si nos abandonan y perdemos fácilmente la perspectiva cuando se trata de amar, muchísimo más que cualquier otra persona promedio.

Pero no puedes sobrevivir destruyendole la vida a otros… O sí?

Vale, tal vez si puedas, de hecho mucha gente lo hace, pero no necesitan al TLP para hacerlo, simplemente lo hacen.

Me molesta que ella tome la etiqueta y contribuya con el estigma de que quienes padecemos una o varias condiciones psicológicas (detesto decir enfermedad mental, me suena denigrante) somos malas personas.

Siendo honestos, no necesita al TLP para ser una basura. Lo necesita para vender, para víctimizarse… Y eso es un asco, una mierda.

Dureza

Hoy, cuando espantaba a un gatito que alguien había dejado abandonado en mi puerta (ya tengo uno que trae varios amigos) me di cuenta de que, al menos en mi caso, es cierto: si tú no logras cambiar al mundo, el mundo termina cambiándote a ti…  

Nunca me hubiera imaginado hacer algo tan cruel, el gatito no tiene la culpa de tener un dueño HDP que lo deje abandonado en la calle esperando que algún vecino le acoja. 

Ojalá que sea reversible, no quisiera convertirme en alguien que yo, de niña, odiaría. 

Etiquetas 

Algo que le falta a mis posts xD 

Todos las tenemos, todos las ponemos; conocemos a alguien y a los cinco minutos ya  decidimos que etiquetado le corresponde.  Eventualmente estos cambian pero algunos se mantienen firmes. 

Las etiquetas provenientes de una enfermedad de la mente son difíciles de entender, la gente al conocerlas automáticamente asume cosas al respecto.  

Generalmente al principio las niegan. “tú no pareces… “,  “no actuas como si… ”  pero luego, cuando te conocen y se dan cuenta de que  “hay algo raro contigo”, entonces se van al otro lado, al de los prejuicios empiezan a tratarte con condescendencia, queriendo decidir por ti, invalidando tus puntos de vista porque eres [inserte la etiqueta]… Y fastidia, vaya que fastidia. 

PD: Ya no faltan, ando poniéndolas xD